Destino: la ciudad de Cuzco dotada de un maravilloso espectáculo como son las ruinas del Machu Picchu, símbolo de una cultura legendaria del pueblo incaico.
Un grupo de salteños y salteñas – reikistas en su mayoría relataron a EL PUEBLO su experiencia en un viaje memorable donde las vivencias fueron enriquecedoras, tanto a nivel grupal como individual.
Amanda Sánchez de Yáñez (madre de Gabriel, dueño de la empresa de viajes Enviatur) en esta oportunidad fue en carácter de turista y calificó la experiencia como «muy enriquecedora y disfrutable».
Todo comenzó cuando una guía de la empresa capitalina Enritur – que trabaja en coordinación con Orientar – brindó una conferencia sobre Machu Picchu.
«Fue tan clara y precisa la conferencista que nos entusiasmamos con el viaje… lo sentimos como una asignatura pendiente y así fue que nos decidimos» – precisó Amanda.
UNA MISCELÁNEA
DE PAISAJES ÚNICOS
El viaje en ómnibus permitió advertir paisajes únicos.
Si bien fueron largos kilómetros recorridos, el grupo tuvo a disposición todo el confort necesarios para ir cómodos y disfrutar de cada momento… a la mañana el despertar con un capuchino y la noche con una agradable y liviana cena que hizo un servicio especial.
El primer alto fue en la ciudad de Salta que fue el comienzo de un paisaje diferente al que estamos acostumbrados a apreciar.
El servicio de hoteles en los lugares elegidos para descansar, fue de primera línea.
La excursión partió el 27 de junio y estuvo de viaje durante quince días que fueron de disfrute para cada uno de los turistas.
Luego de visitar Salta, la próxima parada fue en Iquique, una ciudad perteneciente a Chile, situada frente al océano Pacífico.
CRUCE DE LA
CORDILLERA DE
LOS ANDES
Uno de los momentos más impactantes fue el cruzar en ómnibus la Cordillera de los Andes y posteriormente el grupo fue compenetrándose con «diferentes idiosincrasias y pueblos con su singular identidad, que le dio un ribete enriquecedor a la experiencia.
Para las personas especializadas en el reiki, Cuzco es un ámbito muy energértico.
MACHU PICCHU:
«ENTORNO
IMPRESIONANTE»
Visitando la ciudad de Cuzco podemos descubrir aspectos de la cultura peruana inimaginables.
Declarada como Patrimonio Cultural de la Humanidad, la misteriosa ciudadela incaica es un lugar de visita indispensable, para los que llegan al Cusco. Al recorrrerla, usted también se quedará sin aliento. No querrá marcharse.
CIUDADELA DE
MACHU PICCHU
Tiene dos sectores: el agrario y el urbano. El sector agrario está compuesto por andenes (terrazas de cultivo) construidas en las laderas de las montañas circundantes .
El sector urbano tiene un trazo en forma de «U» y dos grandes conjuntos arquitectónicos, con calles y graderías que totalizan 3,000 peldaños, además de plazuelas y un adecuado sistema de canales de agua, para consumo y regadío.
Las construcciones son de planta rectangular. Muchos de los recintos, llamados masmas, muestran sólo tres paredes. Alguna vez, todas las estuvieron techadas con troncos y paja (ichu).
Las puertas y ventanas están empotradas en forma de trapecio, al igual que los nichos de los muros, en los que se colocaban ídolos y otros objetos, siendo esta una de las características de la arquitectura incaica.
Cada muro de Machu Picchu es diferente a los demás; inclusive las paredes de un mismo recinto presentan estilos diversos. El mejor acabado se encuentra en la pared central del Templo Principal, en donde las piedras cortadas y pulidas se amoldan a la perfección.
Son dignos de atención: el Intihuatana, un reloj solar de piedra pulida; el Torreón, construcción de paredes curvas, y el Templo de las Tres Ventanas.
Por estar localizada en una región del Perú en que confluyen los Andes y la Amazonía, las 32,592 hectáreas que rodean la ciudadela de Machu Picchu, han sido declaradas como zona protegida, a fin de preservar la flora, fauna, formaciones geológicas y los restos arqueológicos .
El santuario es un valioso testimonio de la arqueología y cultura andina, que encaja con el espectacular entorno natural, donde habitan especies de flora y fauna, únicas en el mundo.
Además de Machu Picchu, en el santuario existen 34 grupos arqueológicos que se encuentran interconectados por los Caminos del Inca, una antigua e impresionante ruta prehispánica, que hoy en día puede ser recorrida por los turistas. Destacan las construcciones incaicas de Runquracay, las ruinas de Sacyamarca (similares a Machu Picchu), la ciudadela Phuyupatamaraca (pueblo sobre las nubes), las ruinas de Wañay Wiyna (eternamente joven), el Templo de la Luna y el grupo arqueológico conocido como la «Gran Caverna».