Las Inspectoras regionales de Espectáculos Públicos, del Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU), constataron durante el desfile inaugural de carnaval, algunas irregularidades en torno a la participación de los niños, (muchos de estos sin autorización para desfilar) en distintas escuelas de samba de nuestra ciudad. Esta situación dio lugar a la intervención del organismo que impuso algunas exigencias para el desfile de los niños y además implementó el cumplimiento de las exigencias a efectos de los próximos desfiles de carnaval.
CERTIFICADO MÉDICO
IMPRESCINDIBLE
Con el fin de proteger los derechos del niño y el adolescente, en lo que refiere a espectáculos públicos y específicamente en los desfiles de carnaval, el instituto del niño, pidió como requisitos para permitir dicha participación, una aptitud física, o certificado médico que apruebe que el chico se encuentra en estado físico apto para participar. Pero además es necesaria la autorización de sus padres, y que se tengan en cuenta algunas medidas de seguridad que se encuentran en las normativas establecidas, normativas que en algunos casos no se tuvieron en cuenta.
El pueblo entrevistó a Mabel Bentos, una de las inspectoras de espectáculos públicos de INAU, con motivo de conocer las situaciones de riesgo que se generaron durante el desfile inaugural de carnaval, quien confirmó la situación mencionada.
MUCHOS NIÑOS
SIN AUTORIZACIÓN
Bentos explicó que pese a que los permisos que otorga INAU, para que los niños puedan desfilar en carnaval son gratuitos, y que además se pueden obtener en la Jefatura Departamental del INAU, (ubicada en calle Vilardebó), muchos de los niños que desfilaron por la calle principal de nuestra ciudad durante la primera noche de carnaval, no estaban autorizados para hacerlo. Bentos dijo además que durante el desfile dialogaron con varios de los directores encargados de dichas comparsas y que en una de las charlas, tuvieron que recurrir a la policía, ya que el integrante de una de las comparsas, las habría agredido verbalmente, según Mabel, “por miedo a perder puntos”.
“También encontramos un par de irregularidades en uno de los carros alegóricos, en lo referente a la seguridad de los menores, ya que en el caso de referencia llevaba a un niño, a una altura considerablemente peligrosa, por lo que de inmediato se dialogó con el director para que subsanara dicho error, relató la entrevistada.
De todas formas, y pese a este tipo de situaciones, las que generalmente suelen ocurrir en este tipo de eventos, todas las irregularidades fueron mejoradas gracias al trabajo informativo de las inspectoras.
“En el segundo día de desfile vimos una importante mejoría, y es importante destacar que muchas fueron las personas que se acercaron hasta la Jefatura de INAU para tramitar los permisos, agregó Bentos.
LOS REQUISITOS
ESTABLECIDOS
El INAU como rector de políticas, destinado siempre a proteger a los niños, y salvaguardar aquellos problemas que estos puedan tener durante espectáculos públicos, estableció ciertos requisitos o criterios, que las comparsas deben cumplir, a manera de garantizar la seguridad de niños y adolescentes. En caso de que los niños transporten instrumentos, objetos o banderas, las dimensiones de estas deberán estar acordes a la estatura, peso y edad de los mismos. En cuanto al porte de hachas, sables, espadas, o cualquier tipo de armas, deberán ser de utilería, cuando sean transportadas por niños. Por otra parte, la vestimenta deberá estar acorde a la edad del participante y respeto de su dignidad, integridad física, sicológica y social. Podrán desfilar todos los niños mayores de 5 años que tengan autorización, y no podrán hacerlo conectados a equipos de electricidad, o similares, ni tampoco tirar de carros pesados, manifestó la entrevistada.