En liceo de Baltasar Brum
En dos años nunca les faltó un cordero
La delegación de participantes en la Gira Corriedale por el norte del país, llegó en el primer día de la actividad a Baltasar Brum, donde en el liceo local, se participó de una exposición técnica, de lo que son los cursos de bachillerato de UTU, en combinación con el liceo, el SUL y ALUR entre otros. Los jóvenes estudiantes, en su mayoría de 16 y 17 años, llevan adelante por segundo año un emprendimiento, donde se invernan corderos en un predio chico de poco más de una hectárea.
Vista del Predio experimental en Baltasar Brum, donde los jovenes del Bachillerato diversificado de la UTU, lleva adelanta el proyecto de Invernada con corderos pesados.
La carga es de 44 corderos por hectárea – promedio – donde ingresaron 62 animales en un precio de 1,4. Se hizo una pastura sembrada con raigrás y trébol rojo, se cumplió un período de invernada de cien días. La suplementación se hizo con fardos de sorgo entero, 0,300 gramos por cordero por día. El pastoreo se hizo en parcelas, 4 horas diarias con un encierro nocturno en corral con tejido con cinco metros cuadrados por cordero.
PRODUCCIÓN
La producción de carne fue de 431,2 kilos por hectárea y la producción de lana de 30,8 kilos por hectárea. Se obtuvieron 3.555 dólares por concepto de carne y 561 dólares por concepto de lana. El margen bruto de rentabilidad fue de 1.209 dólares por hectárea. En el año 2011 se hizo un trabajo similar al año anterior, con dos lotes de 43 y 50 corderos por hectárea. la producción física de carne llegó a 987 kilos por hectárea y 30,1 kilos de lana. Los ingresos de carne por hectárea llegaron a los 9.297 dólares. Los ingresos por venta de lana llegaron a 871 dólares. Restando los costos manejados dejó una rentabilidad de 2.434 dólares por hectárea. realmente a las claras no hay dudas que ninguna otra explotación puede dejar estos niveles de ganancia.
GRATIFICANTE
Realmente fue muy gratificante ver, como chicas y chicos de pueblo Baltasar Brum, tomaron esto con mucho entusiasmo y consiguieron estos resultados, que dejaron sin palabras a muchos productores con décadas arriba, incluso varios técnicos de data, la capacitación que van teniendo los estudiantes, y fundamentalmente la dedicación, han puesto de manifiesto que a los jóvenes hay que darles su lugar y prepararlos para estas grandes cosas. Este es el país productivo que se debe construir. Con estudio, esfuerzo y trabajo, inculcándoles la idea que todo se logra y se puede, si hay ganas y si hay apoyo.
Muchos veteranos dejaron caer lágrimas en el liceo, cuando los jóvenes mostraban los resultados de su trabajo. El predio se encuentra junto a la escuela, en la zona urbana, y en dos años, nunca faltó un cordero: la comunidad entendió este trabajo y lo respaldó. El gobierno central debería tomar este ejemplo y replicarlo en otras partes del país, para que esta integración, permita generar fuentes genuinas de trabajo, rentabilidad y bienestar para gente humilde de las zonas rurales.
C.F.P.