Todas las voces…
Jesús Nasario, hombre muy conocido y apreciado en Salto, tanto en el ámbito del deporte, como árbitro de fútbol, como del ambiente gremial en carácter de funcionario judicial y dirigente del sindicato de los judiciales y otros ámbitos donde se desempeña, remitió una emotiva nota de agradecimiento a personas e instituciones que tuvieron que ver con la curación de su hijo que padeció leucemia durante cuatro años.
La publicación de esta carta nos motiva, porque contiene un fuerte mensaje de solidaridad, de agradecimiento y de bonhomia, que entendemos merece compartirse.
El siguiente es el texto de la nota de referencia.
Salto, 6 de enero de 2011.
Agradecimiento
Hoy después de llegar de la capital junto a mi esposa, en las primeras horas de este día tan especial para «los más chiquitos», a nosotros nos trajo la satisfacción de volver a casa, con nuestro hijo Agustín curado, el más «chiquito» de la familia, porque el martes 4 del presente fue intervenido en el Hospital Pereira Rossell, para extraerle el aparatito por el cual le pasaban las quimios, («porta» para nosotros) mientras estuvo en tratamiento de la leucemia que contrajo en diciembre de 2006.-
Este agradecimiento va para todos aquellos que de una u otra forma, estuvieron a nuestro lado, mientras duró el tratamiento, a mis familiares directos y los de mi esposa, a mis compañeros de trabajo de todo el Poder Judicial en Salto, principalmente los del Juzgado de Paz Departamental de Salto, los que estuvieron y hoy están en otros lugares, siempre los voy a tener en mi corazón, a los funcionarios de la División Recursos Humanos del Poder Judicial, a mis compañeros de los Juzgados de Paz Departamental de la Capital de 22º y 23er. Turno, a la Asociación de Funcionarios Judiciales del Uruguay (A.F.J.U.); a los integrantes de la Fundación Peluffo Giggens, tanto los de Salto, como a los de Montevideo, porque entre todos nos ayudaron a llevar adelante el tratamiento a que fue sometido Agustín; a todo el personal del Hogar La Campana, porque cuando necesitamos de ellos, nos hicieron sentir como en familia, como en nuestra propia casa; al Dr. Luis «Ney» Castillo, a todo el personal médico y de servicios del 4to. Piso y del «Hospitalito»; y a los que se sumaron el día 4 del corriente, al Dr. Piñeiro y todos los que lo acompañaron en el block quirúrgico del Pereira Rossell; y muy en especial un Gracias Señor!!! A Dios, por haber permitido que Agustín se curara, por haber dado la claridad necesaria que necesitan los médicos, para hacer un buen diagnóstico de las enfermedades, y en este caso también a las doctoras del Hospital Salto, Dra. Lequini, Dra. Bruno y Dra. Marianela González, que fueron quienes en un lejano día lunes 4 de diciembre de 2006, le detectaron la enfermedad que aquejaba a mi hijo, y que hoy es solo una parte de nuestra historia, con un final Feliz!
Y a Agustín, un Gracias Hijo, por haber soportado todo el tratamiento, en estos cuatro largos años, sin decaer jamás, al contrario sacando fuerza de voluntad de lo más hondo de tu ser, para soportar el tratamiento que al comienzo fue duro, y lo hiciste como un hombre, con tan solo 11 años, y hoy ya llegaste a los 15!, has puesto un empeño muy loable en el estudio, al que has adjuntado una ganas de vivir enormes, solo me resta pedir a Dios que haga de ti, un hombre de bien, que transites por la senda del bien y de la solidaridad, para con tus semejantes.-
Gracias Señor por darme este momento de felicidad junto a todos!
Jesús M. Nasario Silva.C.I. 2.730.470-4