Con el Dr. Ricardo Scaparoni. Médico Pediatra
Así como podemos los adultos encontrarnos con afecciones respiratorias importantes, los niños están más expuestos, por las bajas temperaturas que no nos quieren dar un respiro.
Pueden comenzar estas afecciones a principio del invierno, pero aseguran los profesionales de la salud, que en el corriente año se han visto incrementadas en niños y adultos mayores.
Las consultas en los centros de salud, han sido muchas más en lo que va del año y se suman día a día. Incluso con recomendaciones de los maestros y profesores de que los niños que se encuentran afectados por las mencionadas afecciones y con resfríos de muchos días, no concurran a los centros de estudios.
Dialogamos con el Dr. Ricardo Scaparoni, para conocer cómo afecta el clima en estas situaciones, aunque extrememos los cuidados. Y si en caso de aparecer infecciones, debemos concurrir al médico para brindarles un tratamiento.
Cuando le preguntamos: ¿a qué le llamamos afecciones respiratorias?, esto nos respondía:
“Podemos ver como más comunes y cuando el niño comienza a padecerlas, que es en la parte bronquial y pulmonar”.
¿Los más chiquitos, requieren de mayores cuidados?
Deben ser mayores en aquellos niños que tienen un primer mes de vida y en sus meses siguientes. Pero de ser estos más grandes, hay que tener cuidados siempre, por la disposición que tienen a adquirir algún tipo de virus.
Pero a partir del año, el niño va adquiriendo ya más defensas en su organismo.
¿Cómo podemos diferenciar una afección bronquial de una pulmonar?
Dentro de las más comunes, se encuentra la Bronquitis o Broncoespasmo
¿Qué es Bronquitis?
Es la inflamación bronquial de los grandes, medianos o pequeños bronquios.
Y Broncoespasmo: es cuando el bronquio se obstruye, pudiendo existir una hiperreactividad del bronquio.
De esta forma, hace que este se contraiga y se cierre la luz del bronquio, disminuyendo la cantidad de aire al respirar.
Y para que logre abrir la musculatura del bronquio, necesita medicación. El bronco espasmo en el lactante, es lo que se le llama bronquiolitis: “El asma del lactante”.
Y en el niño mayor, se le llama asma.
¿Broncoespasmo, es el comienzo del asma?
Cuando el niño es bebé, mencionamos que le llamamos bronquiolitis.
Cuando el niño crece y es más grande, es broncoespasmo, lo que produce la enfermedad de asma.
Si tenemos que definir la diferencia y hablamos en cuanto a lo pulmonar, por un lado se encuentra el bronquio, rodeado de tejido.
Y muchas veces si se afecta este, se produce la neumonía pulmonar (nombre científico), lo que comúnmente llamamos congestión.
Además, también la neumonía puede ir muchas veces, acompañada de broncoespasmo, de bronquitis.
¿Dónde tiene su comienzo la infección?
Puede comenzar en diferentes partes del órgano (pulmón).
Habitualmente, en mayor porcentaje afecta uno, pero se puede dar la situación de que afecte a los dos.
Incluso puede empezar con el problema en un pulmón y luego pasa al otro.
¿Cómo es el proceso?
Normalmente, son procesos basales (en la base del pulmón), pero puede aparecer en la parte media o superior, derivando en una bronconeumonía, o puede comenzar con una neumonía.
¿Es siempre el niño tratado a tiempo?
Sí, solo que de no serlo, puede tomar todo el pulmón afectado o pasar de un pulmón al otro.
La mayoría de las veces cuando se la ubica por los síntomas, se localiza y se actúa rápido.
Y no todas las neumonías afectan todo el pulmón. Ni porque tenga una neumonía, estén los dos pulmones afectados.
Pero por lo general, cuando se da a conocer la enfermedad, es en un sector que se puede perfectamente controlar.
¿Cómo se manifiesta en un bebé de 0 a dos años?
De varias maneras.
Porque puede incluso haber nacido con neumopatía, que en esos casos, se llama neumonía connatal. Puede manifestarse por: fiebre alta y de golpe. Decaimiento, tos, rechazo al alimento, con un cuadro respiratorio. Puede cambiar de carácter.
Y hay que tener en cuenta, de que no existe un principio de congestión, como a veces se dice.
Es congestión o de lo contrario no lo es. Pasa lo mismo con el asma.
¿A qué medidas recurre el facultativo para llegar a un diagnóstico?
En la mayoría de los casos, cuando dudamos de lo que está presentando el niño, recurrimos a los Rayos X, que son muy rápidos para diagnosticar y muy efectivos.
En el caso de una congestión, lo único que lo deja seguro de un diagnóstico a un médico, es una placa. Si está con signos de “alarma”, una radiografía de tórax.
Estudio que facilita con tres minutos, un diagnóstico.
Broncoespasmo:
En caso de broncoespasmo, no se puede identificar generalmente.
Se puede apreciar en caso de que sea congestión.
Podemos ver dentro del pulmón que aparece oscuro, como una imagen un poco más clara, mas radio lúcido, que significa que está presente la congestión.
Y también se puede ver si es una patología viral, llamadas condensantes, o no.
¿Son contagiosas?
En el caso de asma o broncoespasmo, no existe el contagio, porque el broncoespasmo es un proceso reactivo frente a un alérgeno (alergia). No necesariamente tiene que haber una bacteria para que se produzca y ello no transmite. Sí, si es neumonía.
Neumonía:
Puede ser producto de una infección, sea viral o bacteriana.
O sea que en caso de tener niños en la casa o personas que en su organismo se manifiesten defensas bajas, tome las precauciones que corresponden.
Hay que tener determinados cuidados, tratando de no hacerlos dormir juntos, sin llegar a aislarlos.
En caso de que el niño tenga tos, con o sin secreciones, incluyendo alguna duda que la mamá tenga y sin ánimo de crear pánico, no lo envíe a la escuela, para que no contagie a otro niño.
¿A la congestión la puede repetir al año siguiente?
No. Se puede curar perfectamente y nunca más volver a adquirirla.
Tratamiento:
Luego de la placa, todo se va a seguir según el informe clínico del niño y su aspecto general.
Realizamos una evaluación, con su frecuencia respiratoria y cuanto es que satura de oxígeno.
Como es su fiebre, si tolera la alimentación. Si ha tenido aporte de líquido, si vomita.
Es muy importante el aporte que tenga y el líquido que logra beber.
Porque más allá de que el organismo lo necesite, es por todo lo que ese niño pierde con el vómito y la fiebre.
¿También se mira su estado anímico?
Se evalúa la psiquis del niño, su estado anímico o si está adormilado.
En algunos niños, existe la posibilidad de que se le deja con un tratamiento en la casa, con un seguimiento y concurriendo a verlo cada tantas horas para seguir su evaluación.
También se encuentran los otros casos, en los que necesariamente, deben quedar internados, ya que vienen arrastrando ese proceso y para mayor seguridad. En un centro de asistencia van a estar mejor controlados.
Algunos consejos para las afecciones de asma:
El deporte en niños mayores a dos años y adolescentes que la padezcan, (salvo aquellos que sufren una molestia grave) es un complemento del tratamiento de la enfermedad, respetando algunas reglas.
Desobstruir la fosa nasal, previamente al ejercicio.
Es necesario adaptar la intensidad del esfuerzo, al grado de gravedad del asma y elegir un deporte que provoque pocas molestias respiratorias. Realizar un precalentamiento prolongado.
Evitar la ingesta abundante de alimentos, antes del deporte.
En lo posible, realizar actividades que exijan menos de cinco minutos de esfuerzos continuos.
Evitar la práctica deportiva si se encuentra con falta de aire, sibilancias, tos seca, o infección respiratoria. Tener siempre en el bolsillo un bronco dilatador, para inhalar en caso de molestia respiratoria y no esperar para utilizarlo.
Enfriamiento físico gradual, al finalizar la actividad.
¿Qué deporte debería elegir?
La natación es un deporte muy recomendado, que permite una reducción respiratoria y desarrolla la musculatura torácica.
Mary Olivera